La experiencia de montar a caballo, o tener algun tipo de contacto con ellos te hace despertar los sentidos, disfrutar, relajarte... Muchas veces comienza como un juego, un reto... "A ver si te atreves", "vamos a hacer algo diferente,vamos a probar" ese es el principio de una larga historia con el mundo de los caballos, al menos, para la mayoría de la gente. Aprecias y respetas al mundo animal y la naturaleza, esa es la base para estar en sintonía. Montas en un caballo desconocído, confías ciegamente en él, disfrutas con él, te hace sentir bien, y eso que "es la primera cita donde nadie se conoce". Es impresionante, el miedo o la inseguridad dura sólo tres minutos, después llega la armonía... La experiencia se repite, te ha gustado, paseas a lomos del caballo y en un par de paseos más ya sois amigos, él espera tu caricia que tu sin duda se la das. La experiencia que al principio empezó como un juego, se ha convertido en una afición que aporta a tu vida más de lo que esperabas y que ya no puedes dejar, pues ya no es sólo diversión, son sentimientos, es bienestar, es salud, es algo inexplicable que te aporta un animal fuerte, grande, poderoso, casi siempre visto como imposible de montar cualquiera, pero sin embargo es noble y es agradecido. La equitación será otra actividad más que aporte grandes cosas en tu vida.
